No puedes confiar en
este sujeto de traje aunque tenga el rostro de tu amado y sea una parte
importante de su mente, o eso dice. No es verdadero lo que me está diciendo
aunque una parte de mi me pide que confié en él; pero lo que me sigue sin caer
en mi total confianza es que me mintió o ¿acaso es verdad? No sé qué pensar, no
sé qué creer; estoy sola. Sé que él miente pero, ¿y si me equivoco? El tiempo
se me está acabando y cada vez este lugar está perdiendo más el control. Debo
sacarle la verdad.
-¿Por qué tan pensativa y callada?- Me pregunto mi novio.
Debo de saber quien está
mintiendo, debo obtener la verdad, debo…
-¿Qué? No nada, es… todo esto, no lo logro creer- Algo me estas ocultando.
-Lo entiendo- Se sintió satisfecho -¿Alguna duda? ¿Algo que
quieres saber o a alguien a quien quisieras conocer?- Dijo con una sonrisa en
el rostro.
¿Por qué sonríes? Tu mundo
se está acabando ¿Qué no logras entender? ¿Acaso me estas tratando de distraer?
No tengo tiempo para tus juegos mí amado aunque, sería una buena oportunidad
para sobrevivir aquí adentro.
-Siempre me pregunte porque a mi novio le costaba tanto
decirme las cosas, la verdad. Quisiera conocer a su mentiroso interno, si es
que me entiendes- Es verdad, en verdad
quisiera saber y a lo mejor pueda entender o tal vez cambiarlo ya que estamos
por aquí.
-Jeje, pero claro,
vamos sígueme- Rió bastante fuerte. Demasiado
fuerte creo yo.
Regresamos a los pasillos de la prisión y ahora estaba
afuera un sujeto que con solo un tenis, un short y unos audífonos corría por
todos los pasillos sudando y exigiéndose dar más diciendo palabras como “tu
puedes” “una vuelta más” “esto apenas comienza” “¿A poco ya te cansaste?”. Paso
a un lado mío sin detenerse ni hacerme caso.
-Llegamos a donde vive el mayor mentiroso del lugar.
Engañaría a cualquiera para cubrir sus acciones, para el bien personal o para
el supuesto bien de las personas que lo rodean; es todo un personaje pero
siempre lo hace con intensiones muy variadas; el bien, el mal. Solo él lo sabe
y espera las consecuencias de sus acciones. Es mi favorito pero ahora está
durmiendo, es una lástima que no puedas hablar con él directamente, será en la próxima
vez que nos vuelvas a visitar del exterior- Y era verdad, dentro de la celda
solo había un hombre con ropa común acostado boca abajo y sus únicos movimientos
eran los de su respiración y uno que otro ronquido.
¿Dormido? ¿Una
sensación, un sentimiento o una personalidad, duermen?... Oh por Dios. Ahora lo
entiendo todo, uno miente y se vuelve mentiroso; nadie duerme y todos están activos;
eso significa que…
Por mi rostro y mis gestos, daba a entender que había
descubierto el mal y eso estaba mal, muy mal.
-Así es chaparra, soy un mentiroso y haré lo que sea para
conseguir lo que quiero- Y con sus brazos alrededor de mi cuello me asfixio
hasta caer inconsciente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario