jueves, 18 de octubre de 2012

Ángel de alas rotas. Parte 1


Un ángel, un ser mítico y misterioso; irreal. Un ser supremo para la mayoría y… divino. Sus alas imponentes ante los ojos de los simples humanos, su piel suave y delicada hecha con la mano de la gracia y la pureza, sus ojos indescriptibles pero hipnotizan tés, sus labios rojos como una rosa y perfectos como algodones, su belleza suprema para todos; o solo para los que la ven. Pero qué pasa cuando la hermosa y pura figura femenina aparece ante nosotros siendo algo todo lo contrario a algo divino, cuando se vuelve un espectro presente y vivo. Cuando está en todos lados sin dejarnos en paz, cuando verla como es se vuelve una maldición, cuando resulta ser un ángel que nos persigue, que está enamorado de nosotros, que destruye lo que toca; que es… una maldita divinidad viva.

¿Qué pasa cuando alguien esta y luego se va? ¿Qué todos la ven y nadie la observa a su vez? ¿Qué es de un ángel que vive con nosotros y solo nos destruye? ¿Qué pasa cuando un ángel tiene las alas rotas y no se eleva para iluminarnos, sino para solo matarnos poco a poco?

Hoy digo que los ángeles están entre nosotros y no todos dan luz a menos que sea una llama de fuego que se expande ante nosotros y queme todo.

Ángel de alas rotas se eleva ante una marea de ilusión, traición, locura, amor, pasión, lujuria, destrucción, muerte, llanto, sufrimiento, felicidad, incredulidad y de una maldición que no tendrá fin.

“La fantasía y un ilusión se vuelven realidad pero no salvara a todos, sino que a nadie” 

No hay comentarios: