No hay palabras para comenzar este texto ya que solo existe
un sentimiento de agradecimiento, orgullo y felicidad; no hay mejor manera de
empezar un reconocimiento con el recuerdo de los momentos que se vivieron, de
esas muestras de cariño, afecto y de mucho, mucho humor y aunque a algunos no
les pareciera; que vayan y sean felices.
Platicas de oficina, platicas de lavadero, platicas de
amigos, platicas de “cosheo” o como se escriba esa madre, platicas de comics,
platicas de caricaturas, platicas de películas, platicas de… ¿qué preferirías,
que te ataque un tiburón o un cocodrilo?, etc. Platicas que solo nosotros
entendemos y recordamos, solo nuestras.
Había días en los que atacaban mucho las tierras mágicas y necesitábamos
dragones y pociones mágicas para sobrevivir, había días en los que el café se
acababa o peor aún; el azúcar, había días en los que la música nos envolvía y
no le hacíamos ni caso al jefe que nos llamaba por nuestro nombre detrás de
nosotros, había días en los que; como un asalto a mano armada, no había jugo de
naranja ni cuernitos, había días en los que el sueño era nuestro peor enemigo
pero aun peor que eso; eran las fotos en ese momento mágico. Había días en los
que Tom Brady era tan malo como al Capone y tan bueno como el Papa (todos
sabemos que es culpable). Había días en los que Jared Leto en verdad era Jesús Cristo (yo digo que si es). Había días en que en la cafetería había mucho queso o
mucha crema o pocos totopos; malditos esos días y había días, esos días
perfectos, espectaculares, mágicos en los que estábamos más salados que el agua
de mar.
Hoy es para agradecerles a todos sus consejos, sus
comentarios, sus enseñanzas, su ayuda, su paciencia y sobre todo; su amistad y
confianza que poco a poco fue creciendo.
No sabemos si nos vamos a volver a ver, ni que va a ser de nosotros
el día de mañana pero aun existiendo esa gran incertidumbre; por este medio les
deseo éxito, paz y mucha felicidad.
PD. Que Ulises ya nos agregue a Facebook.
No hay comentarios:
Publicar un comentario